Árnica (Arniea montana): Planta de flores amarillas, cultivada en nuestros jardines, de 30 a 40 cms. de altura, algo ramosa, de hojas lanceoladas, ovales y lineales lanceoladas, raíz pequeña y horizontal, de sabor acre y amargo y olor fuerte y agradable.
La infusión de hojas o cogollos de esta planta, en dosis de 5 grs. por litro de agua, se recomienda beberla con jugo de limón, a cualquier hora, para curar las enfermedades del hígado.
La infusión de hojas o cogollos de esta planta, en dosis de 5 grs. por litro de agua, se recomienda beberla con jugo de limón, a cualquier hora, para curar las enfermedades del hígado.
La infusión de flores de árnica en dosis de 4 grs. por litro de agua (bien filtrada), se bebe para estimular las fibras musculares de la vejiga y de los bronquios, contra la parálisis de la vejiga, catarro pulmonar y catarro sofocante de los ancianos y de los niños.
También se recomienda contra la disentería, tos ferina, parálisis, retención de la orina y fiebres intermitentes.
Bebida en cantidad excesiva,puede producir envenenamiento. El contraveneno es el opio y el tanino.
Al exterior se usa la tintura, y las flores de árnica en cocimiento, la dosis es de 20 grs. por litro de agua, y se aplica en compresas como resolutiva para descongestionar los tejidos inflamados por irritaciones o golpes. Expulsa y hace circular la sangre detenida, evita los tumores y da pronto alivio al enfermo.
Este mismo cocimiento, agregándole yerba del platero, es excelente para lavar y curar toda clase de heridas (heridas machucadas, pútridas, etc).
Para prepara la tintura, se usan las flores y raíces en partes iguales al 10% en alcohol débil.
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