domingo, 4 de marzo de 2012

Plantas aromáticas

Azafrán (Crocus sativus):

Sus flores son con pedúnculo corto solitarias o en cimas paucifloras son moradas, algo pálidas, con estrías longitudinales, estigmas rojos, denticulados en el ápice, tubulosos y ensanchados en forma de trompa. Florece en otoño.

Es planta rizocarpica con bulbo macizo, aplanado, de escamas secas, lleva cerca de su cima algunas hojas rudimentarias, blanquecinas y otras verdes, lineales algo acanaldas.

El clima frío, menor de 15 ° raja su bulbo y la aniquila, le conviene para que prospere un clima cálido y seco.

Los estigmas de las flores de esta planta, constituyen el azafrán común, de ellos se extrae una materia colorante inofensiva, que sirve para teñir de color amarillo los alimentos, licores y perfumes. Es aromática y se usa como condimento.

Posee propiedades tónicas, excitantes, sedantes, antiespasmódicas, expectorantes y algo narcóticas.

En pequeñas dosis, excita las funciones digestivas. En dosis de 1 a 15 centigramos acelera el pulso, aumenta la transpiración cutánea y la diuresis; produce malestar, calor en el estómago, náuseas, cólicos, por sus influencias, se coloran en amarillo los orines, el sudor, los esputos y las deposiciones.

Respirándolo en gran cantidad, produce cefalalgia, vértigos, sopor y una especie de embriaguez que puede ser seguida de la muerte.

La dosis prudente es de 8 a 10 filamentos para una taza de agua hirviente.

El azafrán sin desecar o secado al sol no sirve.

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